Disney y YouTube castigan al mayor 'youtuber' del mundo por publicar chistes antisemitas en su canal

La guinda del pastel la puso el pasado 11 de enero, en un vídeo que borró posteriormente y en el que aparecían dos hombres sin camiseta que mostraban un cartel en el que se leía: "Muerte a todos los judíos". Pero parece que el gusto del mayor youtuber del mundo por llevar sus chistes al límite venía de lejos. La broma le ha costado en esta ocasión el fin de una fructífera relación comercial con Disney, uno de sus mayores patrocinadores.

Felix Kjellberg, conocido en Internet como PewDiePie, es la mayor estrella de YouTube, con más de 53 millones de suscriptores. El joven sueco de 27 años ha amasado una fortuna multimillonaria gracias a sus vídeos, en un negocio que, hasta ahora, manejaba una filial de Walt Disney. La multinacional y el creador de contenidos planeaban, además, lanzar su propia plataforma audiovisual, Revelmode, un futuro que se ha visto empañado por el retorcido sentido del humor del videoblogger.

Según informa el Wall Street Journal, Disney habría decidido romper completamente sus relaciones con PewDiePie. A pesar de que el joven tenía, por contrato, independencia editorial, "en este caso fue demasiado lejos y los vídeos resultantes son inapropiados", afirmó un portavoz de Maker Studios, la división de Disney asociada comercialmente con el youtuber.

Al igual que este último, el joven sueco ha borrado de su canal otros tres vídeos publicados en enero que acumulaban más de 23 millones de visitas. En uno de ellos, Kjellberg mostraba a un hombre disfrazado de Jesucristo y que afirmaba: "Hitler no hizo absolutamente nada mal".

Por si fuera poco perder a uno de sus principales patrocinadores, la plataforma que lanzó a la fama al joven sueco también ha decidido sancionar su comportamiento. A punto de estrenar su segunda temporada, YouTube ha cancelado la serie que PewDiePie protagonizaba en YouTube Red y producía YouTube.

Además, Google apartará al youtuber del programa Google Preferred, un estatus especial para las grandes estrellas del videoblog y que les permitía obtener pingües beneficios por medio de la publicidad. Según The Verge, la decisión del gigante tecnológico tendrá un efecto directo en las ganancias de Kjellberg, ya que ese estatus VIP proporciona a los creadores un porcentaje mucho mayor de ingresos.

YouTube ha confirmado que no cerrará el canal del celebérrimo videoblogger, pero sí ha retirado los anuncios de los vídeos que desataron la polémica y promete seguir de cerca las próximas creaciones de su estrella para evitar nuevas polémicas.

PewDiePie se excusó este fin de semana con un comunicado en su perfil de Tumblr en el que se reafirmaba en que su canal está dedicado al entretenimiento y "no es lugar para comentarios políticos serios". "Hago vídeos para mi audiencia. Sé que mi audiencia entiende de qué va mi canal cuando entran. Aunque no era mi intención, entiendo que estos chistes podían resultar ofensivos", afirmaba el joven. Para evitar malos entendidos, PewDiePie dejaba patente que en ningún caso respaldaba el discurso del odio.

Respecto al vídeo que ha desencadenado la ruptura con Disney, Kjellberg justifica que "intentaba mostrar lo loco que está el mundo moderno, especialmente algunos servicios que se ofrecen online", en referencia a las solicitudes que había encontrado en la web de servicios Fiverr.

Sin embargo, y a pesar de que su intención era meramente humorística, la línea de la ironía es muy fina, y una web nazi respaldó su discurso. El pasado 23 de enero, el sitio Daily Stormer, recientemente calificado como uno de los mayores portales de odio en EEUU, celebró el vídeo del youtuber e incluso cambió su lema por "el fansite #1 de PewDiePie en el mundo" por "hacer que las masas se sientan cómodas con nuestras ideas".